jueves, 25 de octubre de 2012

Un secreto a voces - Nora Roberts.

Antes de comenzar con la opinión debo decir que este libro llegó a mis manos guiado por la señorita Gaby Nightray, que con su siempre acertada critica me incitó a leerlo asegurándome maravillas entre sus páginas. Tenía razón, lo he devorado tan rápido que incluso he terminado antes que ella misma. Desde aquí le agradezco la recomendación.

Sinopsis: Emma McAvoy es hija de un gran rockero, que desconocía su existencia hasta que la madre recurre a él en busca de dinero. Brian decide quedarse con ella y formar, junto a su prometida y su hijo Darren, una familia feliz. La desgracia les azota cuando Emma es testigo del asesinato de su hermano, aunque luego no será capaz de recordar nada y el crimen queda sin resolver. Esta experiencia hace mella en Emma, quien toda su vida se sentirá culpable, y la convertirá en la victima perfecta de un marido controlador y violento, que minará la autoestima de Emma hasta límites insospechados. Desesperada, utiliza el entierro de un viejo amigo del grupo musical de su padre para huir a California, donde se encuentra con su vieja amiga Marianne, quien le presta su ayuda incondicional. Como también se la presta Michael, hijo del teniente de policía encargado en su día del esclarecimiento de la muerte de Darren. Cuando el viejo caso se reabre al aparecer nuevas pruebas, ante Emma se muestra un camino sin retorno que deberá tener el valor de emprender.

Si os soy del todo sincera creo que la sinopsis no le hace honor en lo más mínimo, para quienes no conozcan de primera mano el trabajo de Nora -como era mi caso- puede que no parezca más que una simple novela con una joven desgraciada como protagonista que acabará encontrando el amor -topicazo- en brazos del típico tío sexy que la salva de un marido cabrón. Pero no es así.
En primer lugar la narración de Nora roza la excelencia, por lo que un simple resumen de la historia, incluso una super adaptación cinematografía, haría que la esencia de la novela desapareciera y con ella ese gancho que te obliga a seguir leyendo aun cuando sabes que estas desatendiendo tus obligaciones por ello -no hice los deberes de mate ¡qué suplicio!- Para continuar la historia es tan completa, compleja y larga, que no es de extrañar que el resumen se trague brutalmente detalles la mar de relevantes. Al fin y al cabo 600 páginas no se resumen en tres líneas. Por último, los personajes están muy logrados. O los adoras o los odias, tienen un gran trasfondo y te conmueven en cada página.

El vertiginoso ritmo de la novela podría ser un inconveniente para meterte en la historia de la manera adecuada, pero no es el caso. Roberts sabe lo que se hace y su agitado ritmo solo consigue que necesites seguir pasando páginas a toda velocidad. Las historias individuales a la trama principal, de algunos de los personajes hacen que te sientas tan confuso como si sus problemas fueran los tuyos, consiguen que cientos de historias dramáticas y tristes se combinen y formen algo hermoso.
Podría seguir hablando durante horas y me quedarían cosas en el tintero.

En definitiva es una historia moderna, divertida, trágica y sobretodo bonita, en la que todo se combina en una explosión de talento que te lleva desde California a Londres, pasando por Nueva York, por Irlanda y por todas y cada una de las cabezas de los personajes. Un best seller con todas las de la ley.
Con todo esto me voy con la sensación de que no es suficiente, supongo que hay cosas que no puedes saber sin leerlo y cosas que por más que explicara no entenderíais. Creo que lo que lo hace tan intenso es que no es una mera historia, no son simples historias entrelazadas, son vidas, las vidas de todos y cada uno de ellos durante años y años, y ante todo la vida que comparten en común.

Dejaría una cita, fragmento o algo por el estilo, pero tendría que escribir el libro entero, así que supongo que tendréis que conformaros.
Sabed que mi próxima opinión no será tan buena como esta, ya tengo entre manos un libro que provoca la necesidad de hacer una fogata bien alta y quemar todo lo que sea, vaya a ser o parezca papel algún día.


martes, 23 de octubre de 2012

El sabor de no quererte - JP



-¡Violet! ¿Ya estas haciéndole publicidad a J Pelirrojo?
-¿Yo? ¿A JP? ¡Ja! Como si la necesitara...

Bueno, ahora enserio, adoro J Pelirrojo. Es un youtuber increíble que hace todo tipo de cosas, personalmente lo que más me gustan son sus canciones (a excepción de su vídeo buscando a Harry Potter, vestido de Ron, que supera todas las expectativas xDD), como la que he puesto ahí arriba.
En mi opinión en una de esas personas que ha logrado lo que quería desde abajo, con la simple ayuda de youtube y una cámara y que realmente se lo ha ganado, no como otros (Violet no mira a nadie pero Bieber caca). Tiene talento, tiene ganas, muchas ganas de hacer lo que hace y quiero que algún día mis nietos -si no los tiro al río- vean este blog -porque lo verán quieran o no- y sepan que a su arrugada abuela le gustaba mucho este chico. [Y entonces lo escucharán y les gustara. A ellos les gusta lo que yo les diga e.e ]

Pasando a la canción, este tema en concreto trata un asunto bastante delicado y lo hace de una forma que me gusta. Dice más con una sola frase que muchas otras canciones enteras que tratan sobre lo mismo. Diría algo más pero lo mejor es que lo veáis vosotros mismos.

No, no es Violet la que va a dejar un link directo a uno de sus canales :)

Bueno, como lo importante aquí es la canción no tengo más que decir, para acabar mi pequeño tributo me despediré como él. 

Sed felices. 
(Si, ya. No me sale igual.)

viernes, 19 de octubre de 2012

50 Sombras de Grey - E. L. James


“Esta saga no deja a nadie indiferente, y no es para menos” me dijeron. “Es increíble, una obra maestra. Incluso está superando el número de ventas de J.K. Rowling” me  dijeron. “Menos mal que no lo he comprado, habría sido un desperdicio para mi bolsillo” digo yo.

No me gusta considerarme una oveja más en ese enorme rebaño que somos las personas. De verdad que no, sin embargo, a veces tropiezo en ese clásico error, el de seguir a la masa, y hoy quiero hablar de mi último traspié. Tiene nombre propio y una autora que debe de estar plenamente convencida de su “gran aportación a la literatura del momento” cuando solo ha concedido la más vulgar de las novelas.  Para no quejarme de un misterio, allá va la información sobre un libro que no recomendaría ni aunque me pagasen por ello.

Sinopsis: Cuando la estudiante de Literatura Anastasia Steele recibe el encargo de entrevistar al exitoso y joven empresario Christian Grey, queda impresionada al encontrarse ante un hombre atractivo, seductor y también muy intimidante. La inexperta e inocente Ana intenta olvidarle, pero pronto comprende cuánto le desea.

Hasta ahí, no hay nada del otro jueves. Ni más ni menos que una novela romántica, como cualquier otra. Atraída por la posibilidad de  pasar un par de tardes sumergida una novela edulcorada con esas críticas arrolladoras, seducida por esa fama que prometía una lectura orgásmica, me hice con el libro en la biblioteca y comencé a leer. Creo que ya he dejado claro que me he llevado la decepción de mi vida ¿verdad? Me reafirmo en ello. Odio a todos y cada uno de los personajes, y por encima de todos odio a Christian Grey. Oh, me imagino que esto levantará ampollas entre sus fans, que tras saber quién era ese tipo, se me antojan similares a las de Justin Bieber: fanáticas hasta el punto de atentar contra la paciencia de cualquiera. Por su puesto, es una opinión. Invito a las fanáticas que pierden las bragas por Christian Grey a que me expliquen qué leches le ven. Bueno, a él, a Ana... al libro en sí. Por favor, iluminadme.

Con respecto a Grey: ¡es un estereotipo con patas! Es decir ¿hola? ¿Dónde está la originalidad en ese personaje? ¡Es totalmente plano, tan predecible que aburre más que un discurso político.  Christian Machoman-guapo-forrado-y-sexualmente-casi-un-dios-griego Grey es una colección de lo que toda moza quiere. ¿He mencionado que-redoble de tambores- toca el piano? Ahora, seamos realistas. ¿Rozando la treintena, nadando en pasta, un Adonis griego, carismático –o eso creo que quiere dar a entender la autora. Yo cada vez que tiene un dialogo deseo darle un puñetazo en la cara- etc, etc, etc... y casualmente disponible? Ah, claro, tiene complejo de Mr. Hide y es un obseso del control,  pero ¿qué son pequeños inconvenientes como esos para tal dechado de virtudes? No disponible para un revolcón, no, porque su pasado incluye traumas del tipo que los pidas. Disponible, eso sí,  para romper su regla de oro de “romances no, el amor es caca” por una estudiante de literatura que es más sosa que Kristen Steward actuando.

Y así, pasamos a la señorita Anastasia Steele. Unos la llamarán inocente. Yo la llamo una frígida, también muy estereotipada. Chica romántica dónde las haya busca príncipe azul. Le salen candidatos de debajo de las piedras, en el trabajo, su amigo el fotógrafo... pero de repente, decide que ¿príncipe azul? Para quien lo quiera. Ella prefiere al maniaco sexual que está forrado y buenorro. ¿El romanticismo? Se suicidó, supongo. Otro punto de la aclamada Ana, es su bipolaridad. “Está loco, que horror ¿eso es un látigo? Jou, pero me lo quiero tirar... es denigrante, me dan ganas de vomitar solo de pensarlo, pero Christian, cariño, azótame mientras yo maldigo de un modo tan estirado que no escandalizaría ni a la señorita Rottenmeier.” La coherencia de esa mujer ha debido de seguir el ejemplo del romanticismo. Un minuto de silencio para ellos, por favor.

Olvidando al resto de personajes, que total, no importan, pasamos al argumento: sexo, sexo, sexo y algunos diálogos. ¿He dicho sexo? Todo ello aderezado con unos clichés que ni los guionistas de comedias americanas. ¿Un ejemplo? Chica embriagada llama a Mr. Pedazo-de-hielo que pasa de todo, sí, pero de golpe y porrazo decide que debería ir a buscarla, aunque no sepa ni dónde está. ¿Cuándo llega? ¡Justo! Cuando otro tipo está a punto de besarla. ¿Trillado? Que vaa. Jamás se me habría ocurrido que Grey interrumpiría ese beso. “No dejo que nadie duerma en mi cama, pero tú, completa desconocida, puedes” ¡Sí, señora! Eso tampoco era de esperar. ¿La única sorpresa? El cuarto de juegos del señorito... que al final no sirve de nada, porque oye, muchos látigos muchos juguetes sadomasoquistas, pero no hace nada digno de escandalizar al lector. No, no veo que unos azotes tengan modo de herir mi sensibilidad.

 ¿Y queréis que os cuente un secreto, mojigatas fascinadas por una novela cutre que apenas trata ese tema que tan famosa la ha hecho? Bram Stoker abordó el asunto de obtener placer del dolor ajeno antes, en 1897 para más datos. Christian Grey es un intento de Drácula sin colmillos, que lo sepáis. Y además, un intento muy poco logrado.

¿Conclusión? En mi humilde opinión, ese libro tiene función decorativa. Como su argumento. O como esa narración que solo se aplica a Grey, porque es todo puro dialogo. Leerlo, no obstante, me ha devuelto la fe en los libros: novelas que antes consideraba mediocres, ahora las considero entretenidas e interesantes en comparación.

Y sin más quejas que añadir, me despido. 

miércoles, 17 de octubre de 2012

Falling Down, Atreyu.



Bueno, me veo en la obligación de mostrar este grupo a todo el que pase por aquí.

Atreyu es un grupo que en sus inicios tocaba  metalcore (increíble, por supuesto) y que ahora parece tirar más por el género rock. A lo lardo de su trayectoria se aprecia una notoria mejora con el manejo de los instrumentos, cosa que hoy en día es de admirar (la mayoría se convierten en caca con el tiempo T.T)

La canción Falling Down, en concreto, es mi preferida porque está basada en la película Rebeldes  y habla de lo difícil que es para la gente olvidarse del pasado.
No será el único vídeo de este grupo que se vea por aquí, eso seguro, son geniales. Os dejo mi parte favorita:
I fear I'll find the avident so horrible (so horrible) To clear my thoughts I drill a hole into my skull clean up my brains and sweep them underneath de rug. I need them more than I needed any other drug. I'm fallin' down.  
 Pd: ¡¡Adoro la voz del batería!!

domingo, 14 de octubre de 2012

Frío, de Laurie Halse Anderson.

Sinopsis: Treinta y tres llamadas sin respuesta. Antes de morir sola, en ese motel de mierda, Cassie la llamó treinta y tres veces, y Lia no contestó ni a una sola de ellas. Treinta y tres gritos de auxilio que no se dignó a responder. Y eso es algo que jamás en la vida se podrá perdonar. Especialmente porque el fantasma de Cassie no deja de recordárselo, visitándola una y otra vez para animarla a reunirse con ella. Algo irónico si se tiene en cuenta que ya no eran las grandes amigas que habían sido en la infancia, y de hecho últimamente apenas se dirigían la palabra.

A pesar de ello, puede que Lia no tarde mucho en hacer caso de la invitación del fantasma de su antigua amiga fallecida porque, al igual que ella, también ha caído en las garras de la anorexia, un trastorno que la consume poco a poco, y contra el que nada pueden hacer las terapias más novedosas.
Es inevitable que Lia siga oyendo esas voces en su cabeza que la llaman "estúpida", "zorra" y "perdedora",  que se vea gorda y fea, que de vez en cuando se autolesione para castigarse y que se muera por estar delgada. Una frase, esta última, que parece inevitable que muy pronto se haga realidad. 

Opinión: Impactante ¿verdad? Es la mejor palabra para definir este increíble libro que te absorbe desde el primer trazo de tinta.
Cuando llegó a mis manos pensé que solo sería otra de esas novelas para chicas, que cuentan la triste vida de una muchacha inadaptada que cae en las garras de la anorexia en un desesperado intento por gustar a los demás. Gran error por mi parte.
La narración de esta novela es como poco  brillante. Hace uso de todo tipo de recursos para llegar hasta tu mente y asustarte. Está escrito en primera persona, en forma de diario, algo que te acerca al personaje principal (Lia) como si vivieras con ella, como si estuvieras en su cabeza. Expresiones como "Cuando era una chica de verdad..." se utilizan de tal forma que te dejan sin aliento.

No se e ocurre más que afirmar que es fantástico y que no conozco persona que lo haya leído sin acabar cautivado. ¡Incluso mi madre, que a penas lee, ha sucumbido a su prosa!

Para terminar la entrada os dejo un de los fragmentos que más se me metieron en la cabeza:
"Saco la verdadera báscula de su escondite secreto, en mi armario, y la llevo hasta el cuarto de baño. El peso debe medirse sobre una superficie dura y firme. Suena el teléfono, un aparato en cada habitación de la casa, con un timbre de campanas navideñas. Salta el contestador automático.
 Hago pis, otra vez, para deshacerme del agua de mi interior, y me desnudo. Me pongo en pie: mido 1.64 metros, un poco menos que el año pasado, cuando era estudiante de primer curso en el instituto. Fue entonces cuando se me retiró el periodo. Fingía ser una adolescente sana y gorda. Ellos fingían ser mis padres. Todo estaba bien.
Cierro los ojos. Cuando subo a la báscula, Jennifer advierte a Emma sobre el helado.Cuando subo a la báscula, Emma ha cogido miedo a la vainilla.Cuando subo a la báscula, mamá está rasgando a un desconocido con el bisturí.Cuando subo a la báscula, las sombras se acercan lentamente. Cuando subo a la báscula, Cassie sueña."
Espero que os entusiasme tanto como a mí. Nos vemos.

viernes, 12 de octubre de 2012

Nunca te fíes de un travesti de fiesta.

¡Buenas tardes!

Debo comenzar este maravilloso relato advirtiendo que todo lo que van a leer aquí es real como la vida misma. Se que no lo creerán, nadie lo hace, pero yo estuve ahí, lo vi todo y ahora os lo mostraré.

Era una tarde como otra cualquiera. Las Nightray y su amiga, a la que llamaremos Alipia por motivos de anonimato, volvían desde un centro comercial en el que había comprado ni más ni menos que unos enormes pomperos de colores.
Cuando se disponían a cruzar la calle un grupo de hombres, entre los que resaltaba uno vestido de hada (¡vivan las despedidas de solteros!), las llamaron para pedirles una foto. Las chicas accedieron encantadas, pero su diversión fue disipándose cuando uno de los hombres reparó en los pomperos.

-¿Qué es eso? ¿Vibradores? -preguntó el hombre mirándolas con aire divertido.

-¡Son pomperos! -Se apresuró a responder Gabriella indignada.

El grupo de fiesteros jugó con los pomperos e incluso se atrevió a pedirle uno a las chicas. Violet se apresuró a negarse, les había costado mucho trabajo encontrarlos ¡habían caminado bajo la lluvia!
Se despidieron y se dieron media vuelta, pero en ese momento Alipia se dio cuenta de que el pompero azul de Violet había desaparecido.
Con su habitual mal carácter  la chica volvió sobre sus pasos en busca de los ladrones de pomperos, se encaró directamente con el que parecía la mano derecha del hada, que les lanzaba comentarios lascivos a ella y a Gabbie, para después ponerse a gritar como loca.

Tuvieron la suerte de encontrarse con un par de guardias civiles que estaban dirigiendo el trafico de la calle y se apresuraron a contarle lo sucedido.
El hombre, creyendo que las chicas no eran más que unas pobres niñas indefensas (porque si, a pesar de la edad real de las muchachas, no aparentaban más de doce añitos) y viendo el estado de embriaguez que llevaban los hombres, comenzó a vociferar muy indignado, mientras su compañero entraba en un bar a buscar a dos de ellos que se habían escondido allí.

En a penas unos minutos el hombre salió del local con el destrozado pompero de Violet y las chicas se alejaron del lugar cabizbajas y de luto por la indecente pérdida de su preciado Púas (cabe resaltar que Violet bautiza con el nombre 'Púas' a todo lo que cae en sus manos).

Colaboraciones.

¡Hola a todos (los cuatro gatos que estéis leyendo esto)!

Esta es una entrada informativa, para explicaros el funcionamiento de las colaboraciones del nuevo blog.
La cosa es muy sencilla. En nuestro perfil hay un correo electrónico de contacto (si no lo encontráis no dudéis en pedirlo en un comentario aquí abajo), a esa dirección podréis enviarnos dos tipos de mensajes:

-Peticiones: si queréis que hagamos una opinión sobre algo en concreto, como un libro, solo tenéis que pedirlo en un e-mail y dejarnos el nombre por el que queréis que os respondamos. Intentaremos subir todas las peticiones como si fuera a haber alguna xD y hacerlo lo antes posible.

-Colaboración especial: si lo que realmente queréis es dar vuestra propia opinión sobre algo (lo hayamos hecho nosotras o no), solo tenéis que enviar un e-mail con la entrada tal y como queréis que sea publicada, con vuestro nombre (o nick), sin faltas de ortografía y, por supuesto, sin nada que pueda considerarse ofensivo para otros lectores.

Esperamos muchas participaciones en este nuevo blog y crecer hasta convertirnos en una pequeña parte de la vida de la gente que nos vea (la parte de la locura y la corrupción, por supuesto). ¡No dejéis de participar!

Segundo Imperio de las Nightray.


Hola a todos y bienvenidos a la versión mejorada ¡del blog de las hermanas Nightray!

Empecemos con una explicación rápida:
Los relatos cuestan un tiempo que nosotras, pobres almas en pena, no tenemos. Requieren concentración y sobre todo inspiración, y la falta de ella ha provocado que el blog se suma en un profundo letargo durante mucho tiempo y en varias ocasiones. La solución ha sido hallada en un modelo de blog más variado, activo y participativo que esperamos que os guste tanto o más que el anterior.

Dicho esto, explicaremos brevemente cual será la nueva dinámica del blog.
Seguiremos subiendo los pequeños relatos que creemos, pero añadiremos un sinfín de cosas entretenidas sobre las que daremos nuestra opinión, por ejemplo libros, películas, series, música, imágenes, ¡incluso viajes y videos nuestros para que podáis poner cara a las locas del otro lado de la pantalla!
En definitiva dejaremos con vosotros una pequeña parte de nuestro mundo, desde críticas hasta pequeñas cosas que necesitamos compartir para que no caigan en el olvido.
También intentaremos informar de acontecimientos importantes, hacer encuestas y muchas más ideas que nos rondan la cabeza (y que no podremos llevar a cabo sin vosotros)

¡Os necesitamos! Y no solo vuestra presencia, queremos vuestras opiniones y colaboraciones cuando llegue el momento.

Aprovechamos esta introducción para aclarar que este es un lugar al que venir a pasar un buen rato y conocer cosas nuevas (o recordar nostálgicamente otras no tan nuevas) y que por tanto no añadiremos contenido delicado, a su vez pedimos comprensión, serán nuestras opiniones las publicadas y no nos puede gustar todo, pero desde ya aclaramos que no pretendemos ofender a nadie y que por mucho que podamos odiar algo no saldrá un insulto de nuestro teclado.